miércoles, 25 de marzo de 2009

bach

hace muchos años, un amigo muy aficionado a la música clásica especulaba sobre qué pasaría si en una discoteca llena de bacalatas -se refería en concreto a la Perindola, Valladolid- de repente el dj en lugar del Chimo Bayo pusiese una pieza de Mozart, o de Bach. su teoría era que el efecto sería mucho más psicodélico y demoledor, más alucinante y alucinógeno que todas las pastillas que la peña se estaba metiendo. 

algo parecido sucedió el otro día, cómo no, en el Lisboa. la chica que pintaba el techo pidió Bach, y acto seguido sonó la Primera Suite para Chelo. en contra de la teoría de mi amigo, allí nadie flipó ni se encabronó (esa era la teoría del dj) ni puso ninguna cara rara. todos los que quedábamos allí, un lunes de madrugada, símplemente escuchamos y apuramos nuestras cervezas.

me encantaría volver a ver a mi amigo y contarle este episodio. seguramente lo apreciaría. en cambio,todo esto ¿qué les importa al Alcalde de Valladolid y a sus matones? tras meses de acoso y presiones (en favor de Dios sabe qué intereses) por fin se van a salir con la suya y cerrar el Lisboa

1 comentario:

Anónimo dijo...

Que pesao con el alcalde... quienes son sus matones??
Que lo cerraran por que los propietarios querrán hacer otra cosa con el inmueble...
Nuestro viejo amigo se equivocaba ya que daba por hecho que la gente de la perindola tenia su cultura musical..y sus gustos y alli la gente iba a escuchar bakalao. La gente quería Bakalao...bakalao del putrefacto de ese que te deja los tímpanos colocados para un mes .. de ese . Es más, apuesto a que aquel rebaño de la perindola aborrecía la clásica mayormente. Y es que hay gente que aunque no lo creamos prefiere un rollito de primavera a un pata negra. Escucharé a Bach!

Ars.