lunes, 31 de octubre de 2011

cambios

(y podría titularse, como siempre, 'contrastes')

"igual que un sábado", dicen que hoy, a efectos prácticos y de calendario, es un día semi-laborable. así solventan el Puente de Todos los Santos en Hungría. trabaja quien quiere y quien no, hace puente. en resumidas cuentas: los colegios, bancos, oficinas... cerrados. vale. pero el mercado, y la mayoría de las tiendas.. ¿¡cerradas?!
eso sí, el próximo sábado, también a efectos prácticos y de calendario se considera laborable. ¿quién no quiere cambiar un lunes por un sábado? y digo yo, que para este sindios -eso es lo que es- mejor lo que hacemos en España: ¡ancha es Castilla!
a mí me da lo mismo porque trabajo tanto hoy como el sábado. así que no pierdo con el cambio. ni gano
cambio de hora, y me levanto una hora antes para ir a correr a la Isla Margarita. cambio los colores pastel de la tarde por los afilados de la mañana. cambio de ritmo porque, por una vez, una emergencia, sirve de algo ser capaz de correr 3km en menos de 10 minutos

en la bici, también cambio de bielas, pero también de pedalier y plato y cadena. y ahora sin cambios, es decir, con un solo piñón, una sola marcha. simple

y los puntos de vista, que cambian cada vuelta de reloj, cada cambio de hoja del calendario. una y otra nueva experiencia que me enfrenta conmigo mismo como en un espejo, devolviéndome un reflejo que me había rehuido tanto tiempo, el espejo de adolescente, de joven compañero de trabajo, y el de eterno solitario que de verdad no necesita nada de nadie pero que de verdad está dispuesto a dárselo todo a quien lo necesite

No hay comentarios: