sábado, 5 de febrero de 2011

santos que yo te diga

por aquí dicen que el 2 de Febrero, el oso sale de su cueva después de un largo letargo. en ese momento puede que se encuentre, adormilado y legañoso como está, con algo que le asuste: su propia sombra. en tal caso se vuelve corriendo adentro de su cueva a seguir durmiendo hasta que 'eso' se vaya. pero también puede que no se tope con su sombra, porque el día está nublado, y entonces prosiga su paseo en busca de un suculento desayuno. y así pone fin a su invierno, y trae primavera para todos

en la tierra de donde yo vengo, símplemente decimos "por San Blas, la cigüeña verás", que no significa casi nada, pues en mi tierra no tenemos primavera -ni otoño- sino diez meses de invierno, y dos de infierno. la tierra que me vio nacer sólo conoce el verano de Santiago a Santa Ana. en la tierra donde me crié las cigüeñas ya no se van -ni se vienen- y les da igual San Juan que San Manuel, no digamos San Blas

pero en mi tierra también decimos 'hasta el cuarenta de mayo no te quites el sayo', que no mienta a ningún santo ni animal, pero es tremendamente útil y sensato. y corrobora lo dicho en el párrafo anterior, dando también, así, la razón a Antonio Machado

5 comentarios:

manolai dijo...

desde luego que cigüeñas vi por tierras de Olmedo, de camino a Madrid, el día de San Blas. y al llegar me dijeron que cuidado con el oso :-)

Anónimo dijo...

no se si andas por aquí o por allá, pero leo con agrado tus reflexiones sobre santos, cigüeñas y gaviotas, tres muy diversos tipos de animales.
Hablando de santos, hoy no es el más propicio para mandar un abrazo, pero en eso estoy, así que, aquí o allá: un abrazo
alistambul

manolai dijo...

allá es aquí. más cerca de Estambul :-) aunque un antiguo colega de Londres me recordaba que más cerca también de Polonia. Y de Austria, donde tocan los Arcade Fire el día de mi cumple. abrazo bien recibido. será por santos.. ¡otro abrazo que te va!

El pirata de interior dijo...

me gusta

manolai dijo...

pero la verdad es que me cago en el puto oso...