éste es más grande y más mejor, pero el de Cartwright tenía algo especial. el techo abuhardillado, los espejos haciendo zócalo, y que estaba pintado con mucha alma. con todo y con lo cutre que era, no había nada comparado con esos baños de septiembre, con la ventana abierta al Poniente, contemplando el Gherkin(!) y la City y los DLR pasando... a veces ibas en el DLR y podías divisar, durante un segundo o dos, la ventana del baño y tal vez Rachel o Montse... pero lo mejor era tú allí, sin nada más que hacer hasta la hora de salir, seguramente a Camden. Koko, Barfly, The Crescent. días difíciles, también
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sábado, 28 de enero de 2006
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1 comentario:
las apariciones fugaces, esos cuerpos de mujer que resbalan en décimas de segundo...
abrazo
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